La iniciativa, que incluye la construcción de una segunda vía, dos túneles nuevos y una estación de ferrocarril, entre otras actuaciones, ha aumentado la velocidad de los trenes a 200 km/h, lo que reducirá los tiempos de viaje de trenes expresos entre Praga y Tábor a una hora.
Esto ha sido posible, entre otros aspectos, gracias a la construcción con recursos propios de los túneles Mezno y Deboreč de 840 y 660 metros de longitud, respectivamente, así como a la ejecución de nuevos puentes y paradas. También ha sido necesario acortar el trazado de la vía, que tendrá un nuevo trazado de dos kilómetros inferior al original, pasando de 19,2 km a 17,2 km.
Un referente en el sector ferroviario
Este contrato, que se completará a lo largo de este año, se suma otros que la compañía ejecuta en República Checa, donde cuenta con una trayectoria de 70 años. Entre ellos, destaca la electrificación del tramo ferroviario entre las localidades de Strelice y Zastávka, valorado en 120 millones de euros.
OHLA también participa en importantes proyectos de movilidad sostenible como los trabajos de reconstrucción de la estación de ferrocarril de Vsetín, la reconstrucción de la doble línea del tramo Adamov-Blansko, la electrificación y modernización de la línea Libina-Uničov y la reconstrucción del puente ferroviario sobre el río Svitava, por un valor de más de 300 millones de euros.